Preparar un plato espectacular no es difícil, se puede sorprender en todas las mesas con variedad, platos sorprendentes y además experimentando sabores nuevos con poco trabajo.

El cultivo de la quínoa, principalmente se realiza en Latinoamérica, desde hace unos 5.000 años, es cultivada desde el nivel del mar, hasta una altitud de 4.000 metros.

La quínoa es en realidad una semilla, considerada un pseudocereal, con más proteínas y grasas, generalmente insaturadas, que cualquier otro cereal, conteniendo omega 6 y omega 3, posee además un alto aporte de fibra, conteniendo también potasio, magnesio, calcio, hierro, vitaminas del complejo B y vitamina E, también es apropiada para celiacos al no contener gluten.

Ingredientes (2 personas):

2 puñaditos de quínoa (podéis cocer mayor para futuros platos)

1 lata de atún

½ pepino

1 pepinillo en vinagre grande

1 tomate

Trocitos de jamón serrano

2 quesitos tipo El Caserío

2 fresas en almíbar

1/2 pastilla de concentrado de carne

Aceite de oliva

Sal

Preparación:

Cocemos la quínoa al vapor, hasta que se hidrate y queden tiernas sus semillas, añadiendo al agua media pastilla de concentrado de carne y un chorrito de aceite.

Dejamos escurrir y enfriar las semillas.

Mezclamos la quínoa, con el atún escurrido.

Colocamos los moldes en el centro de dos platos y rellenamos con la mezcla anterior.

Cubrimos cada montadito de quínoa con taquitos de jamón salado, colocamos un quesito sobre el jamón y sobre este una fresa confitada.

Lavamos, pelamos y troceamos a cuadraditos el tomate.

Pelamos el pepino, troceamos a daditos el pepino y también troceamos a daditos el pepinillo.

Mezclamos todas las verduras, las aderezamos con aceite y sal, repartiéndola alrededor de nuestros montaditos de quínoa.

Guardar en el frigorífico hasta el momento de servir.